Pero poco a poco comienza a ganarse el aprecio de
sus alumnos, y lo que comenzó siendo un trabajo temporal se acaba convirtiendo
en su forma de vida. Eso se produce cuando comprende que para lograr que sus
alumnos aprendan debe incorporar nuevas herramientas, como trazar
paralelismos entre el rock y la música clásica (a pesar de los cuestionamientos
iniciales de la dirección del centro). Como vemos en este segundo fragmento el
profesor va aprendiendo a desarrollar y a amar esta apasionante profesión,
siendo cada vez más apreciado por sus alumnos.
El siguiente vídeo nos muestra cómo presentar
una asignatura el primer día de clase, cómo captar la atención y el interés
de nuestros alumnos, cómo interactuar con los alumnos y llamarles por el
nombre. El profesor resalta la importancia y utilidad de su asignatura y su compromiso
con la misma (“os prometo una asignatura apasionante”). Aunque este
vídeo fue creado con una finalidad concreta (al final del mismo se desvela el
nombre de la asignatura) su mensaje se podría extrapolar a muchas otras
asignaturas.
Un vídeo que invita a la reflexión sobre lo que hacemos como profesores o dejamos de hacer.
¿Te habías parado a pensar que todo tiene su origen en un
buen profesor?